1. Santa Cruz de La Palma

 Aterrizas en La Palma y piensas, ¿Qué hacemos ahora? Relax o empezamos. No pierdas ni un minuto porque La Palma tiene muchísimos lugares que visitar y ninguno igual al anterior. ¡Coge tus maletas y vete a Santa Cruz de La Palma, corre!

  La capital de la isla te sorprenderá no solo por su ritmo de vida, sino también por su arquitectura y sus balcones, sus colores y por supuesto su gente. Tómate un ratito para beber un buen Barraquito y así comenzar bien las vacaciones.

  Empezar por una de las ciudades más bonitas de todas las Islas Canarias es casi una obligación. Y es que Santa Cruz de la Palma rezuma color, belleza e historia por sus cuatro costados. Las casitas de estilo colonial que pueblan las calles del centro histórico, nos recuerdan un pasado estrechamente ligado a Cuba, a los indianos que hicieron fortuna allende los mares y regresaron cargados de riqueza a la ciudad que les vio nacer. Balcones de madera cuajados de flores, placetas adoquinadas y una arquitectura digna de su declaración como Conjunto Histórico-Artístico.

  Esos tintes cubanos alcanzan su máxima expresión durante el Carnaval de Los Indianos. Una fiesta capaz de transportarnos de época y hasta de continente. Cada lunes de carnaval, los palmeros salen a la calle ataviados con sus mejores galas de época para rememorar el regreso de aquellos emigrantes. Una parodia ambientada al son de habaneras y guarachas, y que culmina en una divertidísima guerra de polvos de talco. ¡Muy recomendable!.